Unas 130 personas de España, Italia, Líbano y Siria participan en esta reunión en la que se trabajaron mensajes del XXII Capítulo General y se invitó a dejarnos tocar el corazón y cambiar el mundo haciendo realidad sueños compartidos

“Dejémonos tocar el corazón y cambiemos el mundo que nos rodea. Vamos a navegar juntos para hacer realidad los sueños compartidos”. Con este deseo, expresado por el H. Juan Carlos Fuertes, finalizó el Encuentro Provincial 2018 de Maristas Mediterránea en el que más de un centenar de personas -unas 130 entre hermanos y laicos, procedentes de todas las áreas de trabajo de nuestras obras educativas- han participado y han trabajado, tanto de forma individual como colectiva, los mensajes del XXII Capítulo General celebrado a finales del pasado año en Colombia.

     Bajo el lema “Caja de los 5 Sueños” se desarrolló esta reunión marista, que estuvo estructurada, por tanto, en cinco grandes bloques denominados “Familia Global”, “Rostros y Manos”, “Constructores de Puentes”, “Márgenes del Mundo” y “Realidades Emergentes”. Todas ellas se desarrollaron durante los tres días (25, 26 y 27 de enero) que duró el encuentro en el Centro Marista de Guardamar del Segura y contaron con la colaboración de muchas personas que ayudaron en la organización y desarrollo del evento, el cual estuvo dirigido y coordinado por los Hermanos Aureliano García, Manuel Jorques y Miguel Ángel Ayala (con el apoyo, en decoración y fotografía, del H. Paco Ignacio Vidal y del H. Emilio Gutiérrez), los cuales condujeron las actividades para lograr el mayor aprovechamiento de las mismas, además de amenizar algunos momentos como la presentación del encuentro con la colaboración de Massimo Banaudi (Italia) y Pascale Jalkh (Líbano) y el cierre del mismo con un programa informativo especial titulado “2.0.1 Mirando al futuro” a cargo de José Agulló, Carmen Pilar Cosano y Miguel Ángel Sanchiz, del Equipo Provincial de Educación.

     El trabajo interior y los momentos en grupo estuvieron presentes, a través de las distintas oraciones y las dinámicas, durante todas las jornadas, teniendo como uno de los aspectos más importantes el objetivo de convertirnos -cada uno de nosotros- en constructores de puentes, puentes de misericordia y fraternidad teniendo para ello el corazón abierto, tomando la iniciativa sin miedo e invitar a los excluidos tras salir al encuentro y poner a prueba nuestra capacidad de servicio y su utilidad.    En este sentido, el H. Provincial Juan Carlos Fuertes había arrancado el encuentro con un primer mensaje de que nos paráramos y nos escucháramos “para atrevernos a caminar, a cruzar fronteras y a soñar en grande” para testar la actitud con la que se afrontaba la reunión, que debería ser lo más abierta y valiente posible para que, realmente, fuese “una diferencia que haga que se marque la diferencia”.

     Entre los asistentes, hubo personas procedentes de todas nuestras obras educativas -formales y no formales- en España, Italia y Líbano, además de otra serie de personas significativas dentro de nuestra Provincia y de la institución como es el caso del H. George Hakkin, de los Maristas Azules de Alepo (Siria) y el H. Luis Carlos Gutiérrez, Vicario General del Instituto Marista. Este último dedicó tiempo a realizar un acercamiento a las experiencias y vivencias del citado Capítulo General y trasladarlas al auditorio, incidiendo, entre otras cuestiones, en la espiritualidad, la cual se ha de interpretar como un camino que nos renueva y alimenta, con profundidad y que nos ayuda a recrear a Dios, un aspecto que debe removernos y hacernos salir. “No podemos quedarnos en la capilla, porque hemos de llevarla fuera y encarnarla; ya que Dios nos invita a vivir una vida en plenitud, no una vida a medias”, añadió el Vicario General.

     También hubo espacio, durante el encuentro, para hablar sobre la realidad de laicos y hermanos, los Maristas de Champagnat, llamados a vivir el carisma de nuestro fundador desde diferentes realidades, para contribuir a cuidar la familia y avanzar unidos hacia una nueva pastoral vocacional, profundizar en la cercanía y el acompañamiento y favorecer el discernimiento, así como “cuidar que cada uno encuentre el lugar donde se siente llamado a estar”, tal y como explicó Ana Sarrate, laica marista de la Provincia Ibérica.

     Otra de las sesiones de estas jornadas en Guardamar se reservó para las experiencias con los excluidos y, para ello, hubo varios testimonios interesantes y profundos que corrieron a cargo de Mario y Gabriel, miembros de la comunidad internacional marista en Siracusa, auténticos “constructores de puentes, puentes de solidaridad, integración y acogida”, que hablaron sobre su misión con los inmigrantes. Junto a ellos, el hermano salesiano ‘Pepelu’ y Bilal, un joven marroquí, detallaron cuál es la labor que realiza la Fundación Don Bosco atendiendo a los más pobres en nuestra sociedad. “Hay que pasar las cosas por el corazón y de ahí a la cabeza…”, explicaba ‘Pepelu’ como una de las claves en su trabajo diario.

     Por otra parte, el Delegado Provincial de Solidaridad en Maristas Mediterránea, Fernando Domínguez, presentó la labor de todas las obras sociales y el mapa de su distribución por el territorio junto a la Fundación Marcelino Champagnat. Tras este bloque, se llevó a cabo una mesa redonda con la participación de los Hermanos Juan Miguel Anaya y Manuel Jorques, los cantautores Inma Serrano y Fran Fernández, y el director de la Obra Social Marista de Málaga, Alejandro Matías, que hablaron sobre las realidades emergentes y, en concreto, sobre los Derechos de la Infancia, el Respeto al Medio Ambiente y la Situación de la Inmigración.

     De sus intervenciones se pueden extraer multitud de valiosa reflexiones y mensajes como el hecho de que “cada persona merece un mundo»  (Inma Serrano); que «estamos perdiendo el contacto con la naturaleza y eso nos hace quererla menos, cuidarla menos» (Alejandro Matías); que “no machaquemos a los niños con lo negativo, potenciemos y reforcemos todo lo positivo que tienen» (H. Manuel Jorques); que “no escucharás una canción de inmigrantes en la radio porque ésta se toma como ocio y no para removerse, y el arte es precisamente para esto último» (Fran Fernández); y que “en el ADN de Maristas está el derecho básico de la educación y la defensa del menor» (H. Juan Miguel Anaya).

     En definitiva, tal y como resumió el H. Aureliano sobre las realidades tan duras que existen, “debemos aprender a llorar por el mal de los demás” y hubo un sentir general de que el mundo empezará a cambiar cuando cambiemos cada uno de nosotros. Finalmente, el último día se cerró -de manera divertida- con un bloque para hacer balance de las tres jornadas de convivencia y compartir las conclusiones que se extrajeron de todo este evento.

     Y en esta línea de resumen, el H. Provincial Juan Carlos Fuertes abrió la Eucaristía final del Encuentro sintetizando su experiencia en el XXII Capítulo General de Maristas con la palabra “movimiento” y resaltó la importancia de la transformación interior. “Os invito a que seamos barcos, que crucemos a la otra orilla atravesando el mar de nuestras dificultades para encontrarnos con los que más nos necesitan” … ¿Te animas a descubrirlas con nosotros en el día a día?

                    

CONCLUSIONES

Como conclusiones, se detallaron algunas por cada una de las cinco cajas de los sueños o por cada uno de los cinco sueños de la caja. En concreto, fueron las siguientes:

– De la Caja 1, sobre familia carismática global, se señalaron la búsqueda de espacios y tiempos caminando juntos para compartir vida; la necesidad de formación conjunta; el respeto a los distintos ritmos; la apertura a las familias y a otros contextos; la potenciación de comunidades de referencia; el discernimiento de nuevas formas de vida compartida.

– De la Caja 2, sobre ser rostros y manos de tu tierna misericordia, se subrayaron la transformación de la mirada; la búsqueda de la escucha; el refuerzo del espíritu de familia global; la creación de un camino de ida y vuelta: de dentro hacia fuera…; la definición de la espiritualidad marista y el favorecimiento de los espacios de encuentro.

– De la Caja 3, sobre inspirar nuestra creatividad para ser constructores de puentes, se hizo hincapié en el conocimiento de las orillas del puente; la educación de la sensibilidad generando empatía; la unión de iniciativas de ayuda y de acogida para mojarnos; la evolución de la teoría a la práctica; la potenciación del voluntariado.

– De la Caja 4, sobre el camino con niños y jóvenes marginados del mundo, se valoraron el poner a su servicio todos los recursos humanos y materiales; corresponsabilizarnos con las obras sociales; formar claustros solidarios y planificar y estructurar una pastoral social.

– De la Caja 5, sobre responder audazmente a realidades emergentes, se destacaron el sentimiento de obligarnos a arriesgar en la denuncia y el acompañamiento de los menores y sus familias; el compromiso educativo por la sensibilización ecológica; la educación en el ámbito afectivo sexual en todas las etapas educativas.

                    

                    

Todas las fotos en los siguientes enlaces de cada uno de los tres días:

Fotos Día 1

Fotos Día 2

Fotos Día 3