Más de un centenar de jóvenes de GA1 a GA3 han formado parte del encuentro veraniego que se ha desarrollado en esta localidad conquense

Enfilamos la recta final del verano de 2017 de los Grupos de Vida Cristiana (GVX) de Maristas Mediterránea, descubriendo nuevas iniciativas y nuevos espacios, para ello, en esta crónica nos desplazamos hasta otro punto con presencia estival de la pastoral marista: Arcas del Villar, una localidad de la provincia de Cuenca, una novedad dentro del Verano GVX de este año.

El campamento marista ubicado en esta pequeña localidad conquense ha tenido una única celebración, la del Campamento de GA1 a GA3 (alumnos de entre 11 y 13 años) de la zona 1, esto es, Levante, y el cual ha tenido lugar entre el 16 y el 24 de julio.

En este lugar se han dado cita más de un centenar de jóvenes y 26 responsables del campamento entre coordinadores (Alberto, María, Miguel, Pablo, Pichi y Elena) y animadores (Julia, Lourdes, Carmen, Pablo, Ángels, Juan Diego, Alfonso, Clara, Jesús, María, Marta, María, Paula, Pilar, Rocío, Adri, Ana, Javi, Pablo y Santi) y cuyo objetivo principal ha sido, entre todos, hacer posible que los participantes vean que seguir a Jesús es algo divertido, lleno de risas y momentos de alegría, sencillo y lleno de ilusión y sorpresas.

Y este aspecto se puede descubrir a solas… o en compañía. En los campamentos de Verano GVX se opta por el grupo, cuidando a cada individuo, pero fomentando la experiencia de grupo, de comunidad, de amigos.

“Hemos estado más de una semana juntos con actividades conjuntas, pero no es sólo hacer cosas, sino hacerlas con los demás, favoreciendo una experiencia de grupo para así, por una parte, vivir los valores propios de un cristiano y celebrarlos y, por otra parte, afianzar el sentimiento de pertenencia a los Grupos de Amistad”, ha explicado la coordinadora principal, Elena González.

Para ello, en este campamento de Arcas se le ha querido ‘dar una vuelta’ al contenido y, tanto ha sido así, que lo han puesto patas arriba… o boca abajo, como queramos decirlo. Y es que la temática ha sido de cuentos, pero cuentos con versión propia, originales, que han llevado por título “Érase una vez… el mundo al revés”. Una visión distinta de las fábulas, relatos o historias infantiles para romper con estereotipos y avanzar en el sentimiento de cercanía, de acogida, de evitar prejuicios, etc…

La planificación ha sido muy organizada, puesto que cada día se les ha contado una historia a los chicos, sobre la cual han tenido que adivinar un valor que resulte fundamental para la vida, con la intención -al final del campamento- de hacer balance de todas las cosas aprendidas, y darse cuenta de que se están adquiriendo al participar como miembro de GVX.

A través de personajes de los clásicos infantiles ‘El Rey León’, ‘Los Pitufos’, ‘Caperucita Roja’, ‘La Bella y la Bestia’, ‘Up’, ‘Brave’, ‘Peter Pan’ y ‘Toy Story’ se ha ido profundizando en diferentes aspectos positivos (ser acogedores, ser cooperativos, ser amigos, darnos a los demás, ser detallosos, ser familiares, ser alegres, ser agradecidos) para que los chicos y chicas trabajasen y los lograsen identificar y, en la medida de lo posible, interiorizar.

“Es una forma de aprender jugando, introduciendo la importancia de la imaginación y poniendo en liza la creatividad y la reflexión de los chavales. Con ello, también, descubren que el estilo de los Grupos de Amistad es el estilo de Jesús y de sus amigos, y que somos felices viviendo como él y dando el mismo trato a los demás”, ha comentado Pichi, otra de las coordinadoras.

En esta línea, la programación también ha incluido la puesta en escena de cada uno de los grupos, de sus originales trabajos y sus novedosas exposiciones; además de participar en talleres de prensa y radio, de pulseras, de llaveros, etc… Todo, para combinar al mismo tiempo ocio y aprendizaje.

El enclave natural en el que se ha desarrollado el campamento de Arcas favorecía el trabajo en grupo en contacto con la naturaleza, además de estar junto a otros grupos de jóvenes en verano. Pero no ha sido el único sitio con presencia marista: los poco más de 1.000 habitantes de Arcas del Villar han visto cómo más de 100 jóvenes de GA1 a GA3 ‘invadían’ -de buenas- su pueblo y se hacían con la plaza mayor; y también Cuenca, la capital, ha visto pasear por su casco histórico a los jóvenes que participaban en una gymkana y, de paso, iban conociendo el patrimonio de esta bella ciudad manchega.

En esta sede de Arcas del Villar se han dado cita, por tanto, muchos chicos y chicas maristas de distintas edades. Y, lo mires por donde lo mires, ya sea del derecho o del revés, el resultado es el mismo: la estampa de decenas de niños y niñas que disfrutan, unen lazos y se suman al proyecto común que supone haber puesto en marcha el Verano de GVX 2017. Gracias por ello.